"Y ya no soy yo quien vive, sino que es Cristo quien vive en mí".
Minutos de Amor 20 de septiembre de 2007
El cristiano debe ser un modelo de vida. Nunca serán las palabras las que convenzan, sino el ejemplo, el testimonio. Cada día debemos comprometernos en ser mejores cristianos y aumentar nuestra calidad de vida en la fe. Muchas personas señalan los pecados de otras y no reconocen los propios, miran la paja y tienen una viga. Jesús no se fija en el pecado sino en el pecador, es decir, ya el pecado está cometido y es irreversible, pero el pecador es quien puede cambiar.
Jesús acoge al pecador que lo busca con sincera fe. Jesús se acerca al pecador con misericordia. Jesús no se deja intimidar por las criticas sigue actuando. Jesús lleva a cabo su obra con los pecadores; perdona sus pecados. Jesús es la Vida Eterna por eso otorga la Salvación. Jesús vino a traernos la paz.
Oración: Señor, es tanto lo que nos has perdonado, que mil vidas nos faltarían para amarte en la medida de tu perdón. A pesar de todo, nos acogemos a tu misericordia y esperamos que nos digas: tus pecados están perdonados, tu fe te ha salvado. Escucha, Señor, nuestras súplicas, danos el Espíritu Santo para no endurecer nuestros corazones a las constantes llamadas de tu amor y concédenos vivir en continua conversión.
Ante ti, Oh Madre de Cristo, ante tu corazón inmaculado, queremos unirnos a nuestro Redentor que se ha entregado por nosotros, para que seamos hombres y mujeres que colaboren con Él en la construcción de Reino de Dios en nuestra sociedad. Amén